La postura de la montaña se conoce como Tadasana, lo que en sánscrito se traduce como “tada” que significa montaña y “asana” que quiere decir postura.
Esta postura es conocida ya que es una de las más clásicas y básicas que existen en las prácticas de yoga. Como hemos comentado con anterioridad en otros artículos, el yoga no tiene porqué requerir flexibilidad ni todas las posturas son difíciles de realizar, en este caso traigo una postura sencilla, pero muy importante en la práctica del yoga.
¿Cuál es la postura de la montaña?
Tadasana es una de las asanas principales en las prácticas de yoga y una de las posturas que se realizan de pie.
La postura de la montaña es el punto de partida de muchas secuencias de yoga, es como el momento del que se parte y al que se regresa durante la práctica. La razón principal para que esta postura sea el punto de partida es que estimula el chakra raíz, es decir, proporciona una base estable para crecer y conectarse con la energía de la Tierra.
Su nombre es importante ya que cuando realizamos la postura nos convertimos en un elemento más de la naturaleza y nuestro cuerpo permanece recto, inmóvil y con los pies firmes en el suelo.
La postura de la montaña se conoce como tadasana o samasthiti que en un primer momento pueden significar lo mismo, aunque samasthiti es el nombre que se le da en ashtanga yoga.
El truco para realizarla correctamente es imaginarnos que nos tiran de una cuerda desde la coronilla, de esta manera, estiramos todo el cuerpo sin tensionarlo.
Para realizar esta postura nos tendríamos que colocar al comienzo de nuestra esterilla estirando todo el cuerpo y con la mirada hacia el frente.
El peso debería repartirse entre ambos pies manteniendo los brazos extendidos a lo largo del cuerpo. Los pies deberían estar juntos, pero si esto nos va a hacer balancearse es mejor tenerlos abiertos a lo ancho de las caderas. Deberíamos mantener esta postura durante varias respiraciones.
Tadasana puede confundirse con Urdhva hastasana, pero la realidad es que Urdhva Hastasana podría ser una continuación. Es decir, las dos se realizan igual con la diferencia que en urdhva hastasana los brazos los levantamos por encima de la cabeza, sin alterar la postura de tadasana y manteniendo esa firmeza que ya hemos comentado.
¿Cuáles son los beneficios de Tadasana?
Aunque la postura de la montaña es sencilla se requiere de mucha concentración para realizarla correctamente y recibir sus beneficios.
Como hemos comentado esta postura sirve para equilibrar el chakra raíz, lo que provoca que estemos más conectados con el presente y emocionalmente más estables y seguros. Tener este chakra equilibrado provoca una notable capacidad de recuperación, compasión y paciencia.
Esta postura estabiliza nuestro ritmo en la respiración y fortalece el equilibrio y la coordinación. Simbólicamente al realizar correctamente esta postura aprendemos a no tambalearse ante las situaciones que nos desequilibran.
En el aspecto físico estiramos la columna y tonificamos músculos como los erectores de la espalda y abdominales y el suelo pélvico, caderas y piernas. Así estimulamos también la circulación sanguínea. Gracias a esta postura favorecemos la alineación de la columna vertebral, ayudamos a prevenir la ciática y tonificamos y mejoramos la musculatura general del cuerpo. Además de esto, nos ayuda a alinear nuestra postura.